Conde Alessandro di Cagliostro, Precursor de la Francmasonería de Misraim
El Conde Alessandro di Cagliostro fue un masón, rosacruz, médico y teúrgo europeo.
Nació a principios del siglo 18 y murió a finales del mismo siglo. No se sabe con exactitud la fecha de su nacimiento, pero se conoce que falleció el 26 de agosto de 1795 en la Fortaleza de San Leo, ubicada en el centro de Italia.
Sufrió una implacable persecución, enjuiciamiento, cárcel, tortura, calumnia, difamación y muerte de parte de la Inquisición de la Iglesia Católica. Se duda sobre la veracidad del dato que han dado diversos biógrafos e historiadores sobre su procedencia, quienes han tomado como válida la documentación falsa dispuesta por los inquisidores.
Los verdugos de la Inquisición se dieron a la tarea de tergiversar la identidad de Cagliostro para identificarlo falsamente con el embaucador, estafador, proxeneta y aventurero Giuseppe Balsamo, nacido el 2 de junio de 1743 en Palermo, Sicilia.
Philippa Faulks y Robert Cooper, historiadores y escritores británicos, publicaron en el año 2008 una de las obras más recientes sobre Cagliostro titulada El Mago Masónico: La vida y muerte del Conde Cagliostro y su Masonería Egipcia.
Este libro está basado en serias y profundas investigaciones históricas acerca de documentos recientemente encontrados, incluyendo un manuscrito original del Ritual de la Francmasonería Egipcia escrito por Cagliostro, papeles sobre el proceso inquisitorial contra el mismo y diversos estudios biográficos escritos anteriormente, así como el descubrimiento de que el Libro la Santísima Trinosofía fue realmente escrito por el Conde Alessando di Cagliostro y no por el Conde de Saint-Germain, como se creía anteriormente.
En su obra, Faulks y Cooper ponen al descubierto que Cagliostro no fue en realidad el charlatán llamado Giuseppe Balsamo, sino alguien de elevada estatura moral y espiritual, con grandes conocimientos y sabiduría, que trató de reformar y mejorar la masonería de su época. Demuestran que Cagliostro y su Masonería Egipcia fueron víctimas de un complot de parte de la Iglesia Católica y de personas que lo envidiaban.
Bruno Virgilio Gazzo comenta el libro de Faulks y Cooper diciendo:
"El Mago Masónico narra la historia extraordinaria de Cagliostro, junto a la primera publicación de la traducción completa al inglés del Rito Egipcio. Los autores examinan el proceso en su contra, de que supuestamente fue un impostor y hereje, y descubren que la Iglesia Romana y la historia misma han cometido contra el una terrible injusticia.
Este interesante recuento, sustentado en una notable nueva evidencia documental, muestra que el hombre condenado fue un genuino visionario y verdadero héroe de la Francmasonería. Sus enseñanzas tienen hoy mucho que revelarnos no solo de los misterios de la Masonería, sino también de la misteriosa hostilidad que el movimiento continúa atrayendo."
La Orden Rosacruz ha expresado sobre Cagliostro lo siguiente:
"Nunca se le perdonó que fuese un impulsor de la Luz, y le atacaron por su lado más débil que era el amor que tenía por su esposa, Lorenza Feliciani, quien, a pesar de su bondad, encanto, e ingenuidad, fue convencida por los miembros de la Inquisición haciéndole creer que su esposo era un representante del diablo, lo que le hizo flaquear sirviendo, de esta manera, a los sucios propósitos del Santo Oficio que despachó correos por toda Europa con historias fantásticas, inventándose la figura de Giuseppe Balsamo, para desacreditar al Maestro".
"Cagliostro, el Gran Maestro Cagliostro, nada tiene que ver con el personaje que describe Alejandro Dumas en su obra, Vida de Giuseppe Balsamo, ni con el personaje inventado por la Inquisición para desprestigiar al Gran Maestro".
"Cagliostro fue un Iniciado de primera magnitud y todas las Ordenes Iniciáticas de su época, así lo reconocieron dispensándole honores solo reservados a los más elevados. Fue iniciado en el Rito de Swedenborg, fue amigo de Martinez de Pasqually quien le introdujo en su Orden de los Caballeros Elegidos Cohen, donde le dispensó el Grado más Alto, el Grado secreto de los Reau Croix. Colaboró con Willermoz, y con Louis Claude de Saint Martin, fue Gran Maestro del Rito Escocés, y Gran Maestro del Rito de los Filaletas, así como codificador y Gran Copto del Rito Egipcio."
El Barón von Gleichen, aristócrata y noble de irreprochable integridad y amplia experiencia, declaró que: "La Masonería Egipcia de Cagliostro valía mucho la pena, ya que la encontraba no solo más maravillosa, sino más honorable que cualquier otra Orden Masónica en Europa." Sobre las acciones caritativas de Cagliostro von Gleichen dijo: "El mantenía a los pacientes pobres durante meses, alojándolos a menudo en su propia casa y alimentándolos en su propia mesa."
Wolfgang Amadeus Mozart compuso la famosa Opera “La Flauta Mágica” en honor a Cagliostro y al Rito Egipcio que este último creó.
El Conde Alessandro di Cagliostro afirmó en vida que nació en la isla de Malta en el seno de una familia cristiana de origen noble, de la cual quedó huérfano a los tres meses de edad, y que en su juventud viajó extensamente por diversos países del Medio Oriente y Africa, incluyendo Egipto, acompañado de su Tutor y Maestro el Iniciado Althotas.
Tuvo estrecha amistad y contacto con el 68avo. Gran Maestro de la Soberana y Militar Orden de Malta, Príncipe Emmanuel Pinto da Fonseca, y también con el Príncipe Raimondo di Sangro di San Severo, Gran Maestro de la Francmasonería del Reino de Nápoles y Sicilia, allegado este último al Gran Maestro Pinto da Fonseca. Bajo la Gran Maestría del Príncipe di San Severo, la Orden de Misraim se expandió en Nápoles a partir de 1747, si bien Misraim ya existía en 1728 en esa ciudad, según documentos. Los Príncipes Pinto da Fonseca y di San Severo eran grandes conocedores de la Alquimia, el Hermetismo y la Kabbaláh, las cuales enseñaron a su discípulo Cagliostro.
Cagliostro fue iniciado en la Francmasonería de tradición itálica en la Respetable Logia “Secreto y Harmonía” de Malta, la cual existía desde el siglo 17, mucho antes de la fecha de fundación de la Gran Logia Unida de Inglaterra de 1717 (siglo 18). También fue iniciado en otras tradiciones y ritos masónicos, incluyendo la Masonería de corriente anglosajona.
Fue el fundador del Rito de la Alta Masonería Egipcia, bajo el cual diseñó el Ara o Naos triangular y adoptó el título de Gran Copto. Dicho rito aceptaba a hombres y también a mujeres, estas últimas a través de las logias de adopción (logia femenina dependiente de la masculina).
En 1788 confirió la Carta Patente para la formación del Rito de Misraim de Venecia, convirtiéndose así en el precursor de la Orden de Misraim en la República Veneciana. Su esposa fue jerarca principal de la Alta Masonería Egipcia de adopción.
Cagliostro viajó por toda Europa fundando logias del Rito de la Alta Masonería Egipcia. Además, a su paso por diversas naciones europeas, realizó una intensa labor como médico empírico y benefactor, tanto a favor de personas adineradas como de personas humildes. Tuvo vínculos con grandes personalidades de su época y con diversas corrientes o tradiciones masónicas europeas.
En una carta Cagliostro expresó:
"No soy de ninguna época ni de ningún lugar, y más allá del espacio y del tiempo, mi ser espiritual vive su eterna existencia. Si me sumerjo en mi pensamiento remontándome en el curso de las edades, si extiendo mi espíritu hacia un modo de existencia alejado de aquel que percibís, me convierto en aquel que deseo ser. Participando conscientemente del Ser Absoluto arreglo mi acción según el medio que me rodea. Mi nombre es aquel de mi función, pues soy libre; mi país, aquel donde fijo momentáneamente mis pasos. Poned fecha de ayer si lo deseáis, rehusando acordaros de años vividos por ancestros que os fueron extraños, o del mañana, por orgullo ilusorio de una grandeza que jamás será vuestra, yo soy aquel que Es".
"Como el viento del Sur, como la brillante luz del Mediodía que caracteriza el pleno conocimiento de las cosas y la comunión activa con Dios, voy hacia el Norte, hacia la bruma y el frío, abandonando, por todas partes a mi paso una parcela de mi mismo, abandonándome, disminuyéndome en cada estación, más dejándoos un poco más de claridad, un poco más de calor, un poco más de fuerza, hasta que sea parado y fijado definitivamente el fin de mi carrera, en la hora en que la Rosa florezca sobre la Cruz. Yo soy Cagliostro".